“Latex Rojo” fue un rodaje perfecto con la mejor producción en la que me toco participar, espero que nadie sienta celos. De principio a fin fue una experiencia sumamente grata.

Gerard Marcó de Mas era conocido de mi profe de técnica Meisner de actuación: Iñaki Moreno.
Desde la primer entrevista me entusiasmo mucho el proyecto, los ensayos eran un placer, ensayábamos casi todas las semanas, pero lo mejor paso desde el viaje de ida.

Los del elenco principal, viajamos todes juntes en un auto y paramos a comer a la mitad del camino, no hay nada más lindo que esa experiencia, durante todo el viaje íbamos charlando sobre nuestros personajes y sus relaciones, al llegar a Entre Ríos, lugar donde estaba la locación de “Latex Rojo”, conocimos la estancia, era hermosa y enorme.
Tanto el elenco, como el director nos alojábamos en la estancia y el equipo técnico en una escuela que nos prestaba sus instalaciones.
La jornada empezaba a eso de las 7am con el desayuno, leíamos las escenas del día, ensayábamos y por la noche, a rodar!

Conforme fueron pasando los días y fuimos fortaleciendo vínculos en ficción y realidad, nuestro trabajo se hacía cada vez más sencillo, espontaneo y natural. Gerard acompañaba y favorecía este proceso constantemente.

Fueron los mejores 10 días de mi vida, laboral, por supuesto.
De esta experiencia me lleve mucho, muchísimo aprendizaje como actriz, muchísimas anécdotas hermosas.

A nivel profesional, comprobé una vez más cuán importante es el ensayo, la preparación actoral y el set cuidado.
No siempre contamos con esas condiciones de trabajo, pero si respetamos nuestra profesión, siempre tenemos que pelear estas condiciones, ya que si nuestro trabajo se luce, el resto también.
